PIEZAS DE MADERA DE MANGO

Los árboles de mango se han plantado y cultivado en las regiones subtropicales y tropicales del mundo, desde la India hasta el sudeste de Asia y África, principalmente por sus frutos, pero también por su madera y los taninos en su corteza. En los EE.UU., los árboles de mango se cultivan principalmente en Hawái y Florida. Un árbol de crecimiento rápido puede crecer hasta 5 pies (1,52 m) en un solo año, aunque no se considera una especie invasora y prosperará con muchas otras especies de plantas cultivadas. En la naturaleza, los árboles de mango pueden volverse enormes, con circunferencias tan grandes como de 13 pies (3,96 m). Esto es proporcional a la longevidad del árbol, ya que los árboles de mango pueden vivir por un siglo.

La madera de mango es de textura áspera y su color varía de marrón claro o dorado a marrón oscuro e incluso puede ser rosada en su núcleo. Es una madera dura y es fácilmente secada al horno, pero puede ser propensa a los ataques de hongos, por lo que es a menudo tratada con productos químicos antes de utilizarla para hacer muebles o accesorios. Aunque la madera de mango no es lo suficientemente fuerte para ser utilizada para hacer pisos, es comparable a la teca en su apariencia.

 

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